sábado, 12 de enero de 2019

Un oficio a extinguir

Todo hace pensar, no sé si por fortuna o desgracia, que el oficio más viejo de la humanidad está a punto de la extinción. No, no vayáis a pensar que me refiero a la prostitución, de eso hablaremos en otro momento, más viejo aún que ésta profesión, o cuando menos paralelas, está el oficio de “ama de casa”.
Cada vez descubro, para mi alegría, cómo este sector tan desprestigiado sirve de inspiración en la creación de nuevas empresas que ofertan servicios que le eran propios al “ama de casa”. Hoy en día, se puede prescindir de él… si se dispone de recursos, claro. Toooodo se debe de pagar… si sales del ámbito del hogar.

Hace tiempo que, con los restaurantes, la posibilidad de no cocinar estaba ahí pero, pocos eran los que podían solventarse el tema de la manduca cotidiana por este medio. La mayoría usábamos este recurso, y algunos seguimos usándolo, en días muy  señalados para los que incluso nos vestimos de forma especial.
Hoy, existen tantas ofertas gastronómicas y a precios tan asequibles que una se pregunta si realmente merece la pena todo el trajín de pensar, comprar, limpiar, almacenar, guisar… Lo de cocinar una misma se está quedando desfasado  “¿A pero aún lo haces tú?”... ¡Por supuesto!

 “COCINO POR TI” “COCINA CASERA”, “UN MENÚ PARA CADA DÍA”… por nombrar algunos de los  establecimientos que te hacen la comida. Luego, pasas a recogerla y la llevas a casa donde te lo comes sentadito en tu sofá y en zapatillas… Ni compras, ni cocinas, ni friegas porque tooooodo va en envases de plástico desechables, (¡esta es otra!), mucho más económico y cómodo, ¡con diferencia! que un restaurante. ¡Barato, barato!

¡Pero es que hay más!: Empiezan a verse  lavanderías en las que te hacen tooooda la colada. ¿Aquellas a las que llevabas a limpiar una vez al año el traje que utilizabas para las bodas…? ¡No! ¡Esas no! Otras nuevas que también por un módico precio te lavan los calcetines, los calzoncillos y braguitas, camisas y demás prendas. Y si son un poco cuidadosos… ya ni planchar necesitas y, dado el caso, ¡todos tranquilos!, ya existe otra empresa “YO TE LO PLANCHO” que por otro módico precio te ahorra esta tarea. ¡Ahhhh pero, si además, se te ha caído un botón… estos mismos se encargarán de llevar tu camisa a… “YO COSO POR TI” o “YO TE LO COSO” que en un abrir y cerrar de ojos te colocará un botón idéntico al que se te había perdido. ¡Barato, barato!

¿Y la limpieza de la casa? Si os lo estabais preguntando, ya de esto hemos hablado con anterioridad en otra reflexión,  por un salario irrisorio y casi sin derechos, puedes “contratar” a “una mucama”, “una chacha” que,  ¿¡por cuánto has dicho!? Jajaja un salario irrisorio, además, puede hacerte todas las tareas anteriores… Lo mejor de todo está en esas empresas que gestionan esta actividad quedándose, como no iba a ser  menos,  con un pequeño porcentaje del exiguo salario, de las mujeres que contratan. Porque, no nos engañemos todos estos trabajos considerados socialmente de segunda, “propios de mujeres”, seguirán siendo ocupados por mujeres. ¡Todo Barato, barato!

Paradójicamente, muchas mujeres abandonamos el oficio de Amas de casa para incorporarnos al mundo laboral y, lo  que nos ofertan es hacer lo mismo pero en peores circunstancias…y en condiciones medievales ¡¡¡Y nos dejamos convencer!!!… ¿por la igualdad? ¿acaso con la futura esperanza de poder cobrar algún día una mísera pensión?

Bueno, diréis, pero aún nos quedan la gestación y crianza de los hijos… ¡¡¡Falso!!! Todo está programado y calculado para que sólo te ocupes de tus vástagos unos escasos meses en tu vida. Ya existen recursos suficientes para que dejes a tus criaturas a cargo de otras personas a partir de los tres meses desde las 7 de la mañana hasta las 9 de la noche. Llegan  a casa listos para que los metas en la cama y descansen… ellos y tú. De todo lo que estamos perdiendo, abandonando, esto me parece lo peor.

Creo que, no tardando mucho, viendo cómo avanza de rápido la medicina, la ciencia y la tecnología tendremos vientres tecnológicos, artificiales o algo así que se ocuparán también de la procreación y gestación a demanda… ¡O acaso ya existan y me haya vuelto a quedar otra vez obsoleta!
Se han dado alternativas para  la cocina, la limpieza, la plancha, la costura y hasta la crianza de los hijos… ¿qué queda del oficio de “ama de casa“? Creo que ni siquiera es una cuestión de igualdad  o de lucha de géneros porque, todo esto realmente ¿A QUIÉN ESTÁ BENEFICIANDO?..